Un líder de empresas debe acumular una serie de cualidades básicas para dirigir un equipo eficazmente. Habrá situaciones que te superen en las que tendrás que sacar lo mejor (o lo peor) de ti para salir adelante.
Tendrás que aprender cuándo decir no, cómo motivar a tu equipo e inspirarlo para que incluso te sigan hasta el mismo infierno en algunas ocasiones. Pero esto no es tan fácil, ¿verdad? No cualquiera es capaz de dar con la combinación perfecta.
Con los años que llevo en esto, hay una serie de lecciones que, por las buenas o por las malas, he ido aprendiendo y me han hecho convertirme en quien soy hoy. En este post las comparto contigo para que puedas aplicarlo en tu empresa cuanto antes.
Tus empleados son personas, no máquinas
Un error que podemos cometer en ocasiones cuando nuestra empresa crece y queremos aumentar los números es olvidarnos de quien trabaja para la empresa son personas, y no máquinas. Esto quiere decir que tienen miedos, inseguridades; que cometen fallos y que también pueden equivocarse.
Creo que es importante saber encontrar el equilibrio adecuado entre exigencia y confianza. Con esto quiero decir que sí, que siempre debemos exigir que nuestros empleados den un 200% en su trabajo, pero que también sientan la confianza suficiente con sus superiores para admitir sus errores y sentir que estos no son definitivos.
Habrá ocasiones en las que alguna de las personas que trabajan para ti no tomará ciertos riesgos por miedo a cometer un error y que eso tenga implicaciones demasiado negativas. Y esto no sabes cuánto puede llegar a frenar una empresa.
→ Los valores fundamentales para una empresa exitosa
Los errores son lo que nos hace aprender de verdad. Cometer errores es humano, y es lo que nos motiva a seguir aprendiendo y mejorando día a día. Recuerda, no somos máquinas, ni tampoco perfectos.
Con esto no estoy diciendo que hay que dejar que todo el mundo haga lo que quiera y que cualquier error sea perdonable. Lo que te intento explicar es que es importante dejar un pequeño hueco a las equivocaciones para que tus empleados se sientan más motivados a probar cosas nuevas y a apostar mucho más por el progreso de la empresa.
Es encontrar el equilibrio entre: “no tengas miedo a equivocarte y aprender de ello” y “hay que tomarse esto en serio y dar lo mejor de nosotros en todo momento”. Con la experiencia y el tiempo irás dando con la combinación ganadora.
Apostar por el talento
Dentro de tu empresa verás gente que reluce, que se come a los demás, que tienen una motivación y una ambición que no acaba. Verás gente que trabaja siempre poniéndolo todo sobre la mesa, que se dejarán la piel por tu marca. Encontrarás personas que tengan un talento que brilla por sí mismo.
Estos son los que te pueden ayudar a llevar tu negocio mucho más lejos. Pero tienes que saber cómo.
En ocasiones es difícil llevar el control de todo y saber el nivel de satisfacción de tu equipo con su trabajo. Aún así, te animo a que te intereses por ellos, o que fomentes que los responsables de cada departamento lo hagan.
Entonces verás que algunas de esas personas con brillo propio se están apagando. Otras que tienen un techo irrompible que no les deja desarrollarse profesionalmente. Y no puedes permitirte que eso pase y perder todo ese talento.
→ El pensamiento clave que te ayudará a mejorar tu negocio
Contar con personas con experiencia en la empresa está bien, pero creo que es mucho más importante la capacidad que demuestren.
Si alguien en tu negocio está demostrando tener un talento y una capacidad enormes, prémialo. Apuesta por ello. Dale el espacio que necesita para desarrollarlo y llegar mucho más alto. No dejes que se desmotiven o que crean que su carrera profesional en tu empresa se ha acabado, porque al final los pierdes.
Te recomiendo que siempre pongas a estas personas en que exijan más de lo que ellos pensaban que podían dar. Verás como con el tiempo notas una mejora increíble en su trabajo y en su motivación.
Asumir que hay cosas que no sabrás
Igual que tienes que entender que tu equipo puede cometer errores, también tienes que asumir que tú no lo puedes saber todo. Obviamente, hay otras personas dentro de tu empresa que saben más que tú sobre su campo de trabajo, por algo están ahí, ¿verdad?
A la vez que es tu trabajo guiarlos y motivarlos para desarrollarse profesionalmente, tú también puedes aprender de ellos muchas otras cosas. Dice mucho de un buen líder de empresas que de vez en cuando admita no saber algo y que deje a sus empleados hablar por él.
¿Qué más puedes hacer? Una vez que asumas que no lo puedes saber todo, haz una lista de cosas que no sabes y que sí que puedes aprender. ¿Es fácil, no? Yo a día de hoy sigo aprendiendo muchísimas cosas y sigo buscando formas de ser mejor líder para mis trabajadores.
Lee muchísimo, aunque no te guste, ponte las pilas. Aprende de la experiencia de otros que están en tu lugar, lee sobre inteligencia emocional, sobre liderazgo. Otra forma que está muy de moda últimamente es la de contar con un mentor que te asesore en tu crecimiento profesional.
Da la casualidad (sí, ha sido casualidad, no tenía pensado mencionarlo en este post la verdad) que ofrezco mentorías a personas como tú que quieren superarse a sí mismos y que buscan como ser mejor líder de empresas. Te recomiendo que les eches un vistazo.
Libros para ser mejor líder de empresas
En la oficina de NeoAttack tenemos una pequeña biblioteca con libros sobre todo tipo de temáticas, desde liderazgo hasta mindfulness. Como ya te he dicho, creo que es importante que sigamos aprendiendo y que no paremos nunca de hacerlo. Para ello, los libros son los compañeros ideales.
Te dejo aquí algunos libros que a mí me han servido y que también pueden servirte a ti:
- “Lecciones de liderazgo creativo” de Robert Iger
- “7 hábitos de las personas altamente efectivas” de Stephen Covey
- “Padre Rico Padre Pobre” de Robert Kiyosaki
- “Cómo ganar amigos e influir sobre las personas” de Dale Carnegie
- “Delivering Happiness ¿Cómo hacer feliz a tus empleados y duplicar tus beneficios?” de Tony Hsieh
¿Tienes ganas de más? Aquí te dejo mi biblioteca.
Espero que este post te haya servido de ayuda y que nos veamos en los próximos. Si quieres seguir escuchándome, te recuerdo que también puedes seguirme por mi podcast de Spotify.